La codependencia puede venir de los efectos emocionales, psicológicos e incluso económicos de quienes viven con una pareja adicta.
Es importante recordar que el primer paso es reconocer que se trata de una adicción. Para ello necesitamos informarnos sobre los principales síntomas y signos a reconocer. Así como salir de la etapa de negación. Y no buscar justificar o minimizar el comportamiento de nuestro ser querido.
Recuerda que no es verguenza tener un familiar adicto, vergüenza es no hacer nada para ayudarlo.
Es muy común en estos casos desarrollar una dependencia a la pareja adicta. Que toda nuestra vida gire entorno a sus necesidades. A esto se le conoce como Codependencia.
Codependencia.
La Codependencia es un patrón de conducta entre dos o más personas. En esta existe una dependencia emocional recíproca. Se mantiene por medio de la manipulación, los celos, el control, la obsesión y la permisividad. Una de sus principales complejidades es la búsqueda de proteger, amar y apoyar a un ser querido adicto o vulnerable. Sin embargo, dichas conductas en vez de ayudar, perpetuan y empeoran la situación.
La dependencia va más allá del mero deseo de evitar perder a un ser querido o querer apoyarlo. Tiene que ver con pensar que el otro es imprescindible o insustituible para sentirnos bien. Su presencia es una condición necesaria para nuestra felicidad y haremos todo lo posible por mantenerlo cerca.
Las conductas que se derivan de la codependencia, lo único que generan es el fortalecimiento de la dependencia entre ambos. Así como el reforzamiento de conductas dañinas.
Si tu pareja es adicto lo más probable es que hayas desarrollado una relación codependiente. Es fundamental contar con ayuda terapeutica profesional. Para tomar las decisiones más saludables para nosotros y para nuestro ser querido.
¿Cómo puedo identificar si soy codependiente?
Las siguientes características nos ayudan a visibilizar las principales dinámicas de este tipo de relaciones:
- Falta de autoestima
- Límites difusos
- Necesidad de control sobre la persona
- Temor por la independencia del otro/a
- Necesidad de aprobación
- Sentimiento de culpa y/o responsabilidad por las emociones del otro
- Obsesión con la persona
- Constantes reproches o necesidades insatisfechas
Si estás inmerso en una relación codependiente no te sientas avergonzado. Es una realidad muy común. Debemos aprender a relacionarnos de manera sana, con límites claros y un autoestima fuerte. Esto nos permite priorizar nuestro bienestar emocional. Es un proceso que acompañado de ayuda profesional nos puede llevar a construir la vida que deseamos.
De ahí que es fundamental inlcuir a la pareja en el proceso de recuperación. Y empezar por pedir ayuda. No sólo para nuestro ser querido, sino para nosotros mismos. Los cambios empiezan el día en el que te decides por dar el primer paso. Busca asesoría profesional e inicia hoy el camino hacia la liberación.