Si partimos del hecho que tanto el alcoholismo y las adicciones a otras sustancias son enfermedades crónicas, entonces podremos comprender que son enfermedades que se pueden tratar y controlar mas no “curar”. La presencia de recaídas en estas enfermedades es una posibilidad, por lo que debemos estar concientes de ellas y aprender a enfrentarlas.
Ahora, durante las fiestas de fin de año hay mucha más propención a las recaídas debido a la serie de fiestas en las que se da el consumo de alcohol, así como a los recuerdos que desatan muchas emociones durante las celebraciones.
Las posadas, navidad y el año nuevo son momentos vulnerables para una persona recién recuperada, aún quienes tienen varios años de mantenerse sobrios enfrentan retos durante estas epocas, por lo que es importante estar bien informados sobre qué es una recaída, cómo identificarla, qué hacer en caso de una y sobre todo, cómo prevenirla en momentos más vulnerables.
¿Qué significa recaer?
Recaer significa después de haber estado un tiempo, incluso años, sin consumir alguna sustancia, si vuelve a consumirlas, la enfermedad se reactiva en toda su expresión afectando nuevamente las diferentes áreas de la vida del enfermo. Es por eso que es esencial mantenerse lejos del consumo de ninguna sustancia que se asocie con una dependencia física/emocional, Alcohólicos Anónimos sabiamente nos dice: una no es ninguna y una es demasiado, la espiral de adicción se puede disparar y nos encontramos ante una recaída.
Factores de Riesgo:
1._ Dejar indicaciones: Como cualquier enfermedad crónica si no toman su medicamento la enfermedad se reactiva (recaen). Al dejar de cuidarse, la persona adicta, es frecuente la recaída, ya que regresan patrones de pensamiento y conductas enfermas y lo que más vemos es: el exceso de confianza (“ya estoy bien”) el olvido de su enfermedad y la deshonestidad . Se requiere de ayuda (grupos AA o NA, padrino o madrina, médico, terapeuta, etc.) para mantener la rehabilitación.
El paciente por sí mismo es sumamente difícil que detecte estas actitudes, de ahí que es fundamental poner atención cuando nuestro ser querido adicto deja de asistir a sus grupos de apoyo y/o se aleja de personas clave que lo han guiado en su recuperación.
2._ Aumento del estrés emocional y con ésto no solamente nos referimos a ansiedad o estrés laboral, cualquier acumulación de emociones lo denominaremos estrés.
Por ejemplo enojo, frustración, ansiedad, tristeza, resentimientos, etc. De ahí la importancia de mantener la ayuda para poder hablar de las emociones y evitar llegar a el consumo de sustancias. Si dejan de hablar y manejar sus emociones, éstas se acumulan.
Recordemos que una de las “funciones” de las sustancias psicoactivas en el adicto es “anestesiar” las emociones, por lo que mientras más altas estén éstas, mas riesgo de consumo.
3.- Memorias de consumo: Está comprobado con diferentes estudios clínicos y científicos, que existe una relación entre los recuerdos de sustancia y la presentación del “antojo”. Por tal razón es importante alejarse de personas, lugares y situaciones de alto riesgo que traigan memorias de el consumo.
Asistir frecuentemente a lugares donde solían ir o donde se promueve el consumo de estas sustancias es un factor de riesgo a toamr en cuenta. Un estilo de vida saludable, rodeado de gente positiva es muy importante para la sostenibilidad de la rehabilitación y sobriedad.
4.- Entrar en contacto con la sustancia: algunos piensan que “no pasa nada” si solamente están cerca o “prueban” la sustancia (alcohol y/o drogas), el problema es que ésto provoca que ciertas áreas del cerebro se activen en forma alterada y se presente la compulsión (no poder parar de consumir).
¿Qué riesgos tiene una recaída para la salud?
El problema en la recaída es que la enfermedad continúa desde el punto en que se quedó, es decir el nivel de consumo de alcohol u otras drogas es igual o mayor que en las últimas ocasiones antes de haber iniciado su rehabilitación.
Por eso hablamos de una enfermedad progresiva, empeora con el tiempo y aunque haya estado “limpio” por un tiempo, cuando se reactiva es igual o peor que donde la dejó. Existen riesgos altos que se salgan completamente de control, que los efectos a la salud empeoren con el consumo desmedido, así como un alto riesgo de sobredosis, de ahí la importancia de saber cómo prevenir y cómo reaccionar en caso de que suceda.
¿Qué hacer en caso de una recaída?
¿Qué harían si un familiar que tuvo un infarto cardíaco, vuelve a presentar síntomas de otro infarto? La respuesta obvia es llevarlo inmediatamente a un centro especializado para su evaluación y tratamiento. Es lo mismo con las recaídase en el caso de uan adicción; existe un riesgo alto de complicaciones en las recaídas, por lo que requieren atención lo más pronto posible.
Por esta razón es muy importante que la familia esté al tanto del enfermo, ya que tienden a ocultar su recaída. Si existe la sospecha del consumo de alcohol y/o drogas u observan cambios de conducta, es fundamental llamar a una clínica especializada en adicciones donde podrán recibir atención y guía las 24 horas para determinar el mejor camino a seguir.