Para construir una base sólida hacia una vida en plenitud y libre de adicciones es necesario un equipo multidisciplinar que apoye la inserción de un programa integral que incluya visitas guiadas por un profesional, así como dinámicas terapéuticas multifamiliares. Fuera del tratamiento, es muy importante que los familiares busquen ayuda psicoterapéutica externa, lo que ayudará a cada miembro a trabajar de manera individual sus relaciones de apego, codependencia, a aprender a poner límites y a desarrollar relaciones saludables.

Es esencial que al terminar un tratamiento de adicciones el ambiente al que regresa nuestro ser querido adicto esté listo para recibirlo, tenga las herramientas necesarias para entender su proceso, poner límites sanos cuando sea necesario y darle el apoyo en la justa medida para su reinserción a la vida cotidiana a través de un trabajo o el estudio.

En lo que respecta a la curación de las adicciones, es importante comprender que la adicción es una enfermedad crónica que no tiene una cura en sí, sino que se debe de manejar a través de mantener al paciente sobrio. Esto no quiere decir que la persona no vaya a recuperar su calidad de vida, posterior a detener el consumo y pasar por el tratamiento médico necesario para sobrellevar la abstinencia; un tratamiento para las adicciones se centra en desarrollar las herramientas personales para llevar una vida libre de consumo.

A través de terapias familiares, individuales y grupales; así como la asistencia de consultores y el equipo médico; se busca que la persona fortaleza su autoestima y construya bases y estrategias emocionales sólidas para enfrentar la vida sin recurrir a las drogas.

De igual manera, después del tratamiento inicial existen Tratamientos Secundarios que llevan al paciente a una segunda etapa en la que se reintegra a una vida cotidiana escolar o laboral, para que, guiado por profesionales, aprenda a vivir una cotidianidad saludable que lo mantenga en el camino de la sobriedad. Los tratamientos secundarios, casas de medio camino o de cuidados extensivos son una excelente estrategia, ya que son ambientes controlados donde hay apoyo terapéutico, médico y de consultores que apoyan el camino de nuestro ser querido adicto a reinsertarse de manera más paulatina al trabajo o a volver a estudiar.

Las estrategias de salida del tratamiento son tan importantes como el mismo, así como las estrategias a largo plazo para mantenerse en sobriedad, recordemos que las adicciones no se curan, son una enfermada crónica que se puede manejar de manera exitosa si se cuentan con las herramientas correctas guiadas por profesionales.