Tener un hijo con una adicción es una de las situaciones más dolorosas que puede enfrentar cualquier padre.
La mayoría de las familias no saben cómo tratar a un hijo drogadicto y la preocupación existe aún cuando este sea un adolescente, un adulto joven o un adulto en etapa madura. De cualquier manera, la situación es devastadora para todos los miembros.
Tengo un hijo drogadicto. ¿Qué hago?
Ayudar a su hijo adicto puede requerir que actúes de una manera que tal vez no te resulte natural. ¿A qué nos referimos? A recurrir a las medidas que sean necesarias para ayudarlo.
Quizá una de las cosas que más les preocupa a los padres es que sus hijos terminan odiándolos, por lo que muchos de ellos prefieren pasar de largo la situación esperando que sea una etapa pasajera y que después todo vuelva a la normalidad como arte de magia.
Debes saberlo. No sucede así.
Sabemos que puede ser muy aterrador intervenir, pero ignorar la situación resultará mucho peor a largo plazo. Las personas con adicciones necesitan atención. Por eso, es importante que los padres se involucren e intenten ser un catalizador para hacer que sus hijos realmente se miren a sí mismos y consideren hacer un cambio.
Los expertos recomiendan seguir ciertos pasos para que la familia logre acercarse a un ser querido que enfrenta una adicicón y sea parte de su recuperación.
1. Reconocer el problema.
La mayoría de los padres entran en negación cuando descubren a sus hijos consumiendo drogas debido a que es “emocionalmente seguro” hacerlo. Es decir, como las madres y padres suelen culparse por el problema que enfrentan sus progenitores, prefieren evitarlo y cerrar los ojos.
Pero para poder solucionar un problema, primero debe existir el problema. Enfrentarlo a tiempo aumenta las probabilidades de una rehabilitación definitiva y a largo plazo.
2. Acércate a tu hijo de la manera más natural y saludable.
Una vez asimilada la situación, es probable que tu primer impulso sea confrontar a tu hijo cuando está drogado, gritar de frustración e incluso recurrir a agresiones físicas. Pero esto solo hará que se aleje de ti.
Como padre o madre, debes aprender a expresar tus sentimientos sin juzgar ni atacar; por supuesto que no es fácil, se trata de un proceso lento y que requiere mucha paciencia
Comunícate con empatía, amor y mucha comprensión para lograr identificar la causa del problema, ya que a partir de ahí será mucho más fácil manejar la situación.
3. Asegura tu bienestar emocional
Por más difícil que sea, es importante que te pongas como prioridad. Una adicción es una situación muy difícil de sobrellevar y que terminará afectando a todos los miembros del núcleo familiar. Si no te encuentras bien emocionalmente no podrás participar activamente en la recuperación de tu hijo y el bienestar general de todos tus seres queridos.
La recomendación es que los padres acudan a terapias tanto individuales como grupales para recibir asesoría sobre cómo enfrentar sus emociones y mantenerse unidos.
4. Busca ayuda profesional
Absolutamente nadie está preparado para enfrentar la adicción de un hijo a las drogas; por eso, pedir ayuda profesional es el camino más efectivo para resolver la situación en casa.
Las clínicas de rehabilitación cuentan con personal capacitado e instalaciones especialmente diseñadas para ayudar a personas de cualquier edad que sufren dependencia a sustancias como el alcohol o las drogas.
Dependiendo la etapa en la que tu hijo se encuentre, puede necesitar atención menos controlada con tratamiento en casa y visitas periódicas, o una intervención más completa como hospitalización.
En Clínica Nuevo Ser contamos con cuatro centros de rehabilitación donde más de 15,000 familias han superado una adicción.
Llámanos a los números: +52 (664) 143-093 en México y +1 (619) 734-2339 desde Estados Unidos, o agenda una cita en nuestro sitio.
Te brindamos asesoría 100% confidencial las 24 horas del día.
Recuperar la paz en tu hogar es posible. Te ayudamos.